Una conflictiva y hasta peligrosa situación crearon esta mañana los tristemente “celebres” cabecillas del grupo de invasores de tierras de la comisión “30 de enero” liderado por la procesada e imputada “sin techo” Maura González, secundada por los abogados Ricardo Villalba y Néstor Echeverría.
El abogado Villalba, quien además es funcionario público por partida doble, como docente e inscriptor del Registro Electoral, fue “invitado” a retirarse del perímetro militar y tuvo que acatar la orden calladito, aunque después, desde la calle, comenzó con sus improperios contra los militares y como siempre contra los Acevedo.
Uno de los integrantes de su grupo, un tal Eliseo García Escobar, intentó hacerse el loco y fue detenido y puesto a disposición del agente fiscal Marco Amarilla quien llegó hasta el lugar para el procedimiento de rigor. Este sujeto temerariamente llegó a gritar que el intendente municipal fue quien les mandó invadir el predio militar.
En medio del nerviosismo y confusión, algunos colegas supuestamente habrían intentado acercarse hasta lo militares para realizar notas sobre lo que estaba ocurriendo, siendo advertidos de que hicieran su trabajo desde la calle, fuera del perímetro militar, recomendación que aparentemente no fue llevada a serio por algunos colegas que llegaron a increpar- según audios que circulan- a los militares, gritándoles repetidamente en forma desafiante Arrestame! Arrestame!
Esto habría motivado la enérgica reacción del propio Comandante del Batallón, Teniente Coronel Sergio Julián Espinosa, quien, dentro del predio castrense, con una llave de artes marciales puso “cuerpo a tierra” al colega Marciano Cándia, representante del grupo Vierci.
Esto provocó la reacción de su hijo, Nelson y de otro colega que trabaja en una FM local, quien en una actitud infeliz atacó a patadas a uno de los uniformados echándolo al piso y corrió.
Posteriormente con la presencia del agente fiscal Marco Amarilla la situación se controló, aunque desde fuera del área restringida de los militares tanto la tal Maura González- quien tuvo su celular incautado- y su grupo siguieron vociferando contra los uniformados.